
El partido en Vallecas no fue uno más para Joan García. El portero, que ha acaparado todos los titulares del verano con su controvertido traspaso del Espanyol al Barcelona, se enfrentaba a su primera gran prueba de fuego. Y no decepcionó. Ante un Rayo Vallecano que desbordó con valentía y ambición, el joven guardameta fue la muralla que evitó la debacle de su nuevo equipo, salvando un punto valioso para los culés en un choque que terminó 1-1.
El único capaz de doblegar la resistencia de García fue Fran Pérez, en un gol que llegó tras una polémica jugada que abrió el marcador para el Barça. Lamine Yamal había adelantado a los visitantes desde el punto de penalti, en una decisión arbitral que sin duda generará debate. La conexión entre el VAR y el árbitro Mateo Busquets Ferrer falló, y el ligero contacto entre Lamine y Chavarría en el área se convirtió en una pena máxima que no pudo revisarse. El pitido final del árbitro fue la única voz que se escuchó, y Vallecas se inundó de protestas.
El duelo en el estadio madrileño fue un intercambio de golpes desde el primer minuto. El Rayo, lejos de mostrar el cansancio de su reciente clasificación europea, salió a morder. El equipo de Íñigo Pérez jugó sin complejos contra el campeón de liga y tuvo la primera gran ocasión del partido. Ratiu, con todo a su favor, se encontró con una parada milagrosa de Joan García, que hacía la primera de sus muchas intervenciones providenciales.
El ritmo frenético continuó, con oportunidades en ambas porterías, hasta que la polémica se hizo presente. Lamine Yamal se internó en el área y un leve contacto con Chavarría fue suficiente para que el colegiado señalara la pena máxima. La falta de comunicación con el VAR dejó la jugada sin revisión y el ’10’ del Barça convirtió el gol. La grada de Vallecas, indignada, lamentaba la decisión.
La Muralla Azulgrana, El segundo tiempo fue un asedio del Rayo. El equipo de Íñigo Pérez creció a medida que avanzaban los minutos, aprovechando los espacios que dejaba la defensa adelantada del Barça. Las entradas de Fran Pérez le dieron más verticalidad al ataque rayista, y los jugadores de Flick se vieron superados en muchos momentos del partido.
Finalmente, el empuje local tuvo su recompensa en el minuto 67. Un saque de esquina de Isi Palazón encontró a Fran Pérez, que remató de volea para superar por fin a Joan García con un balón que pegó en el larguero antes de entrar.
A partir del gol, el Rayo buscó la victoria con más ahínco, pero se topó una y otra vez con la figura de García. El portero detuvo un mano a mano a Ratiu y realizó otra parada milagrosa a De Frutos. La última intervención del partido también fue suya, invalidando un gol del Camello que estaba en fuera de juego.
El encuentro, que finalizó en tablas, dejó un sabor agridulce para ambos equipos. El Barça por haber escapado de una derrota segura, y el Rayo por no haber conseguido una victoria que bien merecía. Joan García fue, sin lugar a dudas, el gran protagonista del partido.